Tu libertad…

La  he visto… eres libre  y  lo  gritas… sin una  sola palabra…. pero  lo  has  dicho… aunque no me gusta del todo… probablemente  es lo que más me atrae  a  ti…

También he  visto  tu fuerza… eres incansable… aunque puedo confesarte que me enamoré de tu sencillez… delicadeza incomparable… piel de bebe… madura… sonrisa que no puedo dejar de mencionar… pues  te levantaste muy dentro de mí; engendraste  amor… y escribiste en tu idioma… "propiedad privada"… hoy  no voy a hacer reseña  de  tus hermosos  ojos… ojos negros  cautivadores… que detienen mis minutos…  al escribirte  ellos no salen de mi mente… pero no, será para la próxima...

Tu libertad… es mucho más de lo que expreso en estas líneas… en ellas  te veo caminar… aunque no ignoro tu capacidad de volar… y  tu siervo “iluso” queriendo enseñarte… tú… queriendo conocer  el  mundo… yo… queriendo crear uno para ti… y así hemos vivido... todos estos años... me  duele  tanto ver cuando pasas  esas tardes…  y  pagaría por estar ahí… pues con tu belleza, creatividad  y  mis locuras  podríamos  hacer  tantas  cosas… el discípulo dijo: “no persigas lo que viene detrás de ti”… es que soy tan terco…           

      

Abraham Rivera

 

Estaré ahí…

Y cuidaré  tus  sueños, pues he hecho de eso una  de mis mayores metas… estar ahí… cuidarte… siempre he respetado tu espacio, los limites  que has puesto… como tu fiel soldado…

He recibido lo que me has dado, he aprendido a ser paciente…eso que para otros  es una simple sonrisa… es capaz de iluminar mi más triste soledad… soledad que me acusa… que en ocasiones  se burla  y quiere convencerme… y me dice: “♫♪♫ no queda más que ir aprendiendo a vivir  solo ♫♪ , si te quedan agallas”… sí... Ricardo ha estado conmigo en estos días…

Pero no podrá convencerme… estaré ahí y podré cantarte  al oído esa canción que te escribí… aunque en ese momento no tenga todas las respuestas a tus preguntas… he de arriesgarme… estaré ahí… y tomaré  tu mano… reconozco tu gran valor...

Sin lugar a dudas  eres esa… y,  a mí mismo me examino a ver si soy ese… ese que no tendrá temor de sonreírte…escucharte… y dispuesto a darlo todo… aunque en ocasiones  sufra el no recibir tanto… la resolución a sido tomada… quiero estar ahí… 

Sin conocer  tu morada he memorizado las posibles vías  a tu corazón… y  voy en camino… voy despacio… en ocasiones  rápido… como sea… pero voy en camino, y  estaré ahí…

Abraham Rivera

Como si me amaras…

Así desperté esta mañana… con esa sensación… debo confesarte que se sintió  tan bien… me dije a mi mismo: Ella me ama!!!... y decidí creerlo… imaginé que  tu nombre estaba en ese mensaje… sí, ese que recibí… con mi imaginación cambié el nombre de  Orange  y coloqué  el tuyo…  

Empecé mi día pretendiendo que tú también soñaste conmigo,  y ha sido genial… por  fin pude darle una dirección a la joven de la floristería, y entregarle la nota que te escribí… con mucha prudencia ella digitó cada palabra, sus ojos brillaron, y  sonrió… 

Y dijo en un susurro: “amar, eso lo enmarca todo, y hace la diferencia”… y  salí meditando en esas palabras… 

He escrito en tantas ocasiones  que te amo… tantas veces… que un abrazo tuyo cambiaría mi manera  de hablar… que un instante a tu lado corrige mis errores… y escucharte por horas utilizar  tu  acento… provoca en mí una sonrisa protagonista, esa que  tanto llama tu atención… y  te hace leer estas palabras…  cambiaría mi sonrisa por uno de tus días… te arriesgarías?...

Abraham Rivera.

 

He vuelto…

Ya en mis ojos no hay lágrimas… ya encontré la fe en mi corazón... Esa que hizo que llenara mi carpeta de versos para ti… esos que reflejan cada suspiro que produces... estaba escondida, con voz tenue, manos  sudorosas… ni la reconocía… decidí conversar con ella, explicarle que la necesito… 

Me reveló sus motivos… le hablé de los míos, y pude convencerla… ahora somos uno…  y la traigo de manos… 

Hablamos de nuestros nuevos planes… le recordé que cada día sigues estando en mi mente, que  aunque en ocasiones  he renunciado, no puedo dejar de pensar en ti, en esos ojos negros… inigualables… de incalculable valor para mi, que me llenan de calor en esas noches de frío…   ella sonrió… y me dijo…que necesitaba ese espacio… ese tiempo que todos necesitamos para encontrarnos… conocernos  mejor  y  madurar…  

Hoy mis pasos son diferentes… un solo día… por más simple y corto que parezca puede producir cambios significativos,  yo tuve muchos  de ellos…  y recuerdo… 

Reconozco que en ti reafirmo mis pies… sigues siendo mi meta, lugar y persona en la que podré descansar... como diría  Lola  tengo razones suficientes para llevarte en mi corazón…  

Abraham Rivera.