miércoles, 1 de junio de 2011

Me dijo adiós…


No creí que ese día llegaría… me vestí de estupideces en tantas ocasiones, vociferaba en voz alta… con mis hechos: “no me importa, puedes irte ahora mismo”, mis días  sin tus  “reclamos y exigencias absurdas”  serían más suaves… y hoy con lágrimas en tus ojos…me dijiste adiós…

Nunca había experimentado respirar sin latidos… que un instante ruidoso podía darme tanto silencio interior… me quedé sin habla… el sólo recordar… me ha llenado de terror y dolor…

Ahora quiero detener el tiempo y tragarme todas mis palabras… pero no fui dotado con ese don divino… quien podrá amarme como lo has hecho tú?… dime quien…? quien soportaría mi mal humor… quien resistiría… (Sin golpearme) mis cambios de ánimo…?  quien más soportaría mi loca familia…? 

Me dijo adiós… y entré en pánico… mi orgullo quiso ocultar mi agonía… mi semblante me venció… que tonto… y aún me pregunto… quien soportaría mis largos silencios? e intentaría establecer una conversación conmigo… quien fue el sabio/a  que dijo: “no sabemos lo que tenemos, hasta que llega el día en que podemos perderlo”… quiero invitarle  a  almorzar y llorar con él/ella… 

Decirte adiós es como despedirme de mi mismo… no me resigno… desperté y  golpee mi sueño y no quiero volver a soñar en ese día en que me digas adiós… pues  a  pesar de mi insensibilidad, reconozco todo lo que has hecho para que funcionemos, y realmente quiero que funcionemos…  perdóname… 


Abraham Rivera

No hay comentarios:

Publicar un comentario