![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiBeOJ3CECInyUG_zk6AdXP-Vu3_Dk0IVXXDJubkNV6OQTA5hKWv9Ps_7Lu_O2NermziCn-2ZDDQd1J2JekRkVpFgy0ypyiTs4u0N0dAq6bcUye8jP_xJTx1MvdCtX-Yfne67MZaEBdpiGh/s320/P1010206.jpg)
Más que un día, tormenta; atardecer sin ocaso… un día sin ti, como jardín sin rosas ha venido a ser… perfume del perfumista que ha perdido su olor; pues al enterarse de mi tristeza afligido por la nostalgia detuvo sus manos e inclinó su rostro, sus lágrimas corrompieron su esencia… el arte dejó de ser su música…
La noche al imaginar mi pena dejó de ser noche y comenzó a ser día… las estrellas muy afligidas, emprendieron un viaje… dijeron no regresar hasta que no estés aquí… conmigo… concédele a los enamorados una noche estrellada...
Un día sin ti… no, no quiero ni pensarlo, te has convertido en mi acorde mayor y la voz que me acompaña, incluso cuando nadie más me quiere hablar, te has vestido de paciencia tantas veces y has callado, aun con el derecho de gritar… y en tu silencio me has enseñando que las heridas que provocamos aunque sanan dejan cicatrices… y así has ganado la batalla que yo mismo inicié… tengo una lista de los males que has corregido en mi… invertiste tu tiempo sin exigirme crédito , me salvaste…
24 horas lejos de ti, sin verte, que utopía… tu espacio vacio nunca nadie lo llenaría… quien tiene sonrisas mañaneras como las tuyas… son melodías perfectas, que tiernamente me dicen amor… a tu lado cada día tiene un nuevo color, el mismo que me empuja querer regresar a casa para reencontrarme contigo… quédate aquí y no me expongas a un día sin ti... recuerda que la soledad es un ruido burlón, agudo y doloroso… que desgasta el alma y disfraza el rostro…
Mis alimentos son insípidos cuando no estas aquí… el desanimo, como mi fiel enemigo torna mi cuarto oscuro, pues tú eres mi luz… me toma de la mano, llevándome a la orilla bruscamente, me prohíbe bailar… aunque no hay música si tu no estás… dime a quién podré abrazar cuando mis brazos estén cansados, eres mi soporte… aquí estoy y tú no estás, ya tus ojos no me enseñan el camino que te había señalado… pero confío que antes que termine este día, regresarás y podremos continuar escribiendo nuestra historia…
Abraham Rivera
podríamos si pudiéramos.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
Eliminar